HMS Talent
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El reino de Gran Bretaña envía un submarino nuclear a las Malvinas, adonde arribará el 14 de junio próximo, aniversario de la rendición argentina, para realizar tareas de patrullaje y vigilancia.

Así lo anuncia el diario The Sun, que titula “England v Argentina... we bring on the sub” (Inglaterra vs Argentina... llevamos el submarino), y advierta que "hay mucho discurso sobre las 'Falklands', pero sólo una nación en este conflicto cuenta con submarinos nucleares".

 

"Los últimos preparativos se están realizando en Sudáfrica antes de un despliegue en el Atlántico Sur. El HMS Talent se dejará caer por las islas Malvinas. Está construido para proteger los intereses de Gran Bretaña", precisó una fuente del Ministerio de Defensa a la publicación británica.

 

La presencia del submarino nuclear en la zona " mitigará los temores acerca de intentos inoportunos de la Argentina en el aniversario del 14 de junio", describe en la nota el periódico inglés.

 

El HMS Talent fue puesto en servicio en 1988 y saldrá de los mares recién en 2019. Hasta el momento, realizó operaciones alrededor del mundo, en su mayoría de vigilancia. Emplea energía atómica para su propulsión, pero no cuenta con ojivas nucleares. Sin embargo, los misiles Tomahawk con los que va armado tienen un alcance de más de 2.000 kilómetros.

 

El HMS Talent es el penúltimo de siete submarinos de la clase Trafalgar y fue lanzado al mercado en el año 1988, por la Princesa Ana, en Barrow-in-Furness. Según detalla la página oficial de la Royal Navy, el papel principal del "cazador-asesino" (así lo denominan) es atacar a otros barcos y submarinos.

 

Para ello cuenta con cámaras y periscopios que registran imágenes térmicas. Y lleva misiles Tomahawk Land Attack (TLAM), que le aportan al barco la posibilidad de realizar ataques agua-tierra.

 

En 2007 le agregaron un nuevo núcleo del reactor y lo equiparon con el Sonar 2076, el más avanzado de todas las marinas del mundo, que tiene el poder equivalente a aproximadamente 400 computadoras personales y le permite seguir el movimiento de pequeños objetos a cientos de kilómetros de distancia, por lo que cuenta con una enorme precisión al momento de lanzar misiles.

 

La nave submarina mide 85.4 metros de largo, pesa unas 5.000 toneladas, alcanza una velocidad de ruta de 60 kilómetros por hora y puede sumergirse hasta 305 metros de profundidad.



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