Los que reaccionaron son los grandes terratenientes. La preocupación de ellos es que el incremento en la valuación de la tierra rural aumentará el precio fiscal de sus campos, que serán alcanzados por el impuesto a los bienes personales.
“Hace veinte años que había revalúo.”
Por Gabriel Bencivengo
Ellos dicen abiertamente que no están dispuestos a poner dinero para mejorar la situación de los habitantes del resto del país. Es una actitud mezquina. No quiere contribuir al fisco nacional”, afirma Silvina Batakis. En diálogo con Miradas al Sur, la ministra de Economía de Buenos Aires asegura que la reforma tributaria que envió el Ejecutivo provincial a la Legislatura, y que tiene ya media sanción, no sufrirá modificación alguna cuando se trate el miércoles próximo en Diputados. “Hay una necesidad de mayor equidad. El proyecto tiene una profunda convicción: generar condiciones que hagan posible mantener el empleo. Los cambios impositivos que impulsamos buscan que aporten más los que más se han beneficiados con el modelo. Nuestra intención es contribuir a la Nación fortaleciendo los impuestos patrimoniales. Es una decisión que tomó Daniel Scioli y que me enorgullece llevar adelante”, señala Batakis.
–La reacción de las patronales del campo viene por el lado del revalúo del inmobiliario rural, un impuesto que hace años que no se actualiza…
–El modelo macroeconómico generó un aumento de la rentabilidad. El incremento de los precios en dólares y el mantenimiento del tipo de cambio favorable le dieron sustento al capital productivo.
–Las valuaciones fiscales no reflejaron ese aumento del capital productivo…
–Le doy un ejemplo. Hoy, el valor fiscal de todas las tierras rurales bonaerenses es de unos 20.500 millones de pesos, menos de la mitad de la valuación fiscal del parque automotor que tributa en la jurisdicción. La Sociedad Rural no quiere ni oír hablar de un sistema impositivo de carácter progresivo. Hace veinte años que no había revalúo. Si se hizo el revalúo de la tierras urbanas, ¿por qué no se va a hacer con el campo?
–Hugo Biocati dice que si se sanciona la iniciativa será un desastre para los productores.
–En Lincoln, una hectárea tiene una valuación promedio que ronda los dos mil pesos. Con el revalúo se irá a unos 8.000 pesos. Ellos venden esto. Lo que no dicen es que el valor de mercado de esa hectárea es de 8.000 dólares y que, en Lincoln, por ejemplo, el 54% de los productores pagará lo mismo o menos.
–Si tuviera que ponerlo en número de hectáreas…
–Con esta reforma, los dueños de unos cuatro millones de hectáreas, sobre un total de 19 millones, pagarán menos…
–¿Por qué?
–Porque junto con la suba se aplicará una reducción de la alícuota efectiva, que quedará en el uno por ciento frente al cuatro actual. Esta decisión amortiguará el aumento. En promedio, el incremento será del orden del 40%. Pero hay más. La Sociedad Rural nada dice de un hecho trascendental, como la desgravación de las mejoras productivas, un mecanismo que permite concentrar el impuesto sobre la tierra.
–Las patronales del campo sostienen que no todas las tierras tienen la misma productividad, que no es lo mismo una hectárea en la zona núcleo que, por ejemplo, en Bahía Blanca…
–No se puede diferenciar qué tierra es más productiva que otra porque no existe un estudio profundo a nivel provincial. Cada vez que se quiso avanzar con el tema, el campo, que tiene un gran poder de lobby, frenó las iniciativas. Lo que hicimos, para evitar ese lobby, es simplificar el proceso mediante el revalúo. La agencia fiscal bonaerense comenzó con este trabajo a mediados del año pasado.
–¿Cuánto más recaudará la Provincia mediante el revalúo del inmobiliario rural?
–El año pasado recaudamos unos mil millones de pesos. Sancionada la ley, estimamos que la recaudación por este rubro alcanzará los 1.300 millones. Los más beneficiados serán los municipios, porque el impuesto rural es el tributo con mayor impacto en los recursos municipales por su alto grado de coparticipación.
–El paquete de leyes que debatirá el miércoles la Legislatura incluye, además del revalúo del inmobiliario rural, un pedido de autorización para amplia el endeudamiento público provincial.
–Es uno de los tres capítulos del proyecto de ley. El fundamento es fortalecer las finanzas de la provincia. La idea es ampliar el endeudamiento en el mercado local mediante la emisión de letras del tesoro por unos 2.000 millones de pesos. Hoy, las concisiones para emitir deuda pública en los mercados internacionales no son las mejores. Por eso decidimos emitir deuda de corto plazo. La plaza local está muy líquida y las letras presentan un alto atractivo para los inversionistas.
–Hay quienes califican como delicada la situación financiera de las provincias. Un análisis que alcanza a Buenos Aires…
–No es el mejor año. La decisión del Gobierno Nacional de reprogramar las deudas del programa federal de desendeudamiento constituye una ayuda muy importante para nuestra provincia. Nosotros replicamos la decisión hacia el interior de la jurisdicción para ayudar a los municipios. Nuestro cálculo indica que vamos a terminar el año en forma equilibrada.
–¿Qué masa de recursos significa el paquete en su conjunto?
–Estimamos que generará recursos por casi 2.700 millones de pesos. De ese total, los municipios se llevarán unos 1.000 millones, casi el 40%.
–La reacción de las patronales del campo viene por el lado del revalúo del inmobiliario rural, un impuesto que hace años que no se actualiza…
–El modelo macroeconómico generó un aumento de la rentabilidad. El incremento de los precios en dólares y el mantenimiento del tipo de cambio favorable le dieron sustento al capital productivo.
–Las valuaciones fiscales no reflejaron ese aumento del capital productivo…
–Le doy un ejemplo. Hoy, el valor fiscal de todas las tierras rurales bonaerenses es de unos 20.500 millones de pesos, menos de la mitad de la valuación fiscal del parque automotor que tributa en la jurisdicción. La Sociedad Rural no quiere ni oír hablar de un sistema impositivo de carácter progresivo. Hace veinte años que no había revalúo. Si se hizo el revalúo de la tierras urbanas, ¿por qué no se va a hacer con el campo?
–Hugo Biocati dice que si se sanciona la iniciativa será un desastre para los productores.
–En Lincoln, una hectárea tiene una valuación promedio que ronda los dos mil pesos. Con el revalúo se irá a unos 8.000 pesos. Ellos venden esto. Lo que no dicen es que el valor de mercado de esa hectárea es de 8.000 dólares y que, en Lincoln, por ejemplo, el 54% de los productores pagará lo mismo o menos.
–Si tuviera que ponerlo en número de hectáreas…
–Con esta reforma, los dueños de unos cuatro millones de hectáreas, sobre un total de 19 millones, pagarán menos…
–¿Por qué?
–Porque junto con la suba se aplicará una reducción de la alícuota efectiva, que quedará en el uno por ciento frente al cuatro actual. Esta decisión amortiguará el aumento. En promedio, el incremento será del orden del 40%. Pero hay más. La Sociedad Rural nada dice de un hecho trascendental, como la desgravación de las mejoras productivas, un mecanismo que permite concentrar el impuesto sobre la tierra.
–Las patronales del campo sostienen que no todas las tierras tienen la misma productividad, que no es lo mismo una hectárea en la zona núcleo que, por ejemplo, en Bahía Blanca…
–No se puede diferenciar qué tierra es más productiva que otra porque no existe un estudio profundo a nivel provincial. Cada vez que se quiso avanzar con el tema, el campo, que tiene un gran poder de lobby, frenó las iniciativas. Lo que hicimos, para evitar ese lobby, es simplificar el proceso mediante el revalúo. La agencia fiscal bonaerense comenzó con este trabajo a mediados del año pasado.
–¿Cuánto más recaudará la Provincia mediante el revalúo del inmobiliario rural?
–El año pasado recaudamos unos mil millones de pesos. Sancionada la ley, estimamos que la recaudación por este rubro alcanzará los 1.300 millones. Los más beneficiados serán los municipios, porque el impuesto rural es el tributo con mayor impacto en los recursos municipales por su alto grado de coparticipación.
–El paquete de leyes que debatirá el miércoles la Legislatura incluye, además del revalúo del inmobiliario rural, un pedido de autorización para amplia el endeudamiento público provincial.
–Es uno de los tres capítulos del proyecto de ley. El fundamento es fortalecer las finanzas de la provincia. La idea es ampliar el endeudamiento en el mercado local mediante la emisión de letras del tesoro por unos 2.000 millones de pesos. Hoy, las concisiones para emitir deuda pública en los mercados internacionales no son las mejores. Por eso decidimos emitir deuda de corto plazo. La plaza local está muy líquida y las letras presentan un alto atractivo para los inversionistas.
–Hay quienes califican como delicada la situación financiera de las provincias. Un análisis que alcanza a Buenos Aires…
–No es el mejor año. La decisión del Gobierno Nacional de reprogramar las deudas del programa federal de desendeudamiento constituye una ayuda muy importante para nuestra provincia. Nosotros replicamos la decisión hacia el interior de la jurisdicción para ayudar a los municipios. Nuestro cálculo indica que vamos a terminar el año en forma equilibrada.
–¿Qué masa de recursos significa el paquete en su conjunto?
–Estimamos que generará recursos por casi 2.700 millones de pesos. De ese total, los municipios se llevarán unos 1.000 millones, casi el 40%.
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