Cualquiera que siga los discursos de la presidenta de la nación sabe que el eje principal sobre el que estructura sus alocuciones es el llamado a la unidad de los argentinos entendiendo que éste es un requisito básico para crecer con equidad y edificar una sociedad más justa. El acto de Vélez, precisamente, fue convocado bajo la consigna "Unidad y Organización", a la que Cristina Fernández de Kirchner agregó "Solidaridad". Tenemos entonces que "Unidad, Organización y Solidaridad" expresa el núcleo político-ideológico del segundo mandato de Cristina.

Otro de los ejes que fundamentan los discursos y la gestión presidencial es la lectura fina de la crisis internacional y la consiguiente puesta en marcha de mecanismos para que sus coletazos impacten de la manera menos perjudicial en nuestra economía, de ahí que, por ejemplo, se hayan instrumentado en 2008 una serie de medidas contracíclicas para proteger el empleo y el mercado interno que resultaron vitales para que las consecuencias del desbarajuste mundial no incidieran de manera devastadora sobre nuestro país. Este año, entre otras medidas se puso en marcha un celoso plan de administración de comercio exterior que, por supuesto, es abominado por medios como el diario La Nacion, que objeta el proteccionismo si se lo practica en nuestro país pero lo admite como un dato de la realidad cuando nuestra propia economía lo sufre en su relación con economías ultra proteccionistas como la estadounidense y la europea. Los que en ellos está bien, en nosotros es imperdonable.

Ayer, en el acto por el 196 aniversario de la declaración de la Independencia, Cristina volvió a hablar de la unidad nacional como requisito para seguir reconstruyendo el país y enfrentar las consecuencias de la crisis internacional. La presidenta volvió a repetir ante los tucumanos lo que dice en cada acto, pero La Nacion interpreta hoy en su portada que esa convocatoria fue generada por la crisis... El título que hoy propone en su tapa es "Por la crisis, Cristina llama a la unidad nacional" y por si fuera poco, en la bajada de esta nota se lee "Admitió que es imposible evitar los coletazos del desajuste mundial"

Se podría pensar que La Nacion no le presta la más mínima atención a los discursos de la presidenta pero no es así, este título es una muestra más de un accionar recurrente en los medios opositores. Consiste en realizar interpretaciones forzadas de la realidad y ponerlas como titulares rimbombantes, olvidando que los tiempos han cambiado y que en la actualidad la sociedad tiene diversas vías para hacerse de la información y por consiguiente darse cuenta de cómo algunos medios comunican anteponiendo obscenamente sus intereses políticos al periodismo "objetivo" e "independiente" que dicen practicar.