Comienza a deliberar en foz de iguazú la cumbre de presidentes del bloque regional
Por Randy Stagnaro y Catriel Etcheverri
Desde el tajante “No” al ALCA que el ex presidente estadounidense George Bush debió soportar en la Cumbre Ibeoramericana de Mar del Plata de 2005, el bloque sudamericano tomó un renovado impulso para alcanzar la integración económica. Sin embargo no todo pasa por la economía, y el camino que parecen decididos a desandar las naciones de estas latitudes no descuida el aspecto social.
Así quedó evidenciado ayer cuando el canciller Héctor Timerman adelantó que los presidentes Cristina Fernández, Luiz Inácio Luda da Silva, José “Pepe” Mujica y Fernando Lugo realizarán mañana, en el marco de la XL Cumbre de jefes de Estado del Mercosur, que se celebra en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, una declaración conjunta en favor de la protección de los trabajadores migrantes.
Lejos del espíritu que prima en los países centrales, que pugnan por la eliminación de trabas aduaneras de modo de brindar una mayor libertad a la circulación de mercancías al tiempo que levantan barreras a los movimientos de hombres y mujeres del mundo en desarrollo, los países del Mercosur se mostrarán decididos a plantar bandera en defensa de la dignidad de todos los migrantes. Los mandatarios avanzarán en la creación de un Estatuto de Ciudadanía para el bloque regional. Luis María Kreckler, secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, señaló que la norma “constituye un plan de acción para la futura conformación de un Estatuto que otorgue a los habitantes de nuestros países derechos y beneficios concretos en su calidad de ciudadanos del Mercosur”. El plan sobre el que trabajarán los presidentes prevé la libre circulación de personas y la igualdad en las condiciones de acceso al trabajo, la salud y la educación.
En la reunión que mantendrán los presidentes mañana, y que servirá como despedida oficial para el mandatario brasileño, que entregará el próximo 1 de enero el poder a Dilma Rousseff, también podría concretarse la creación del cargo de Alto Representante del Mercosur, de manera que el bloque cuente con una figura política de relevancia capaz de representar sus intereses. También se aprobó el criterio de representación ciudadana que determinará el número de bancas que cada país tendrá en el Parlamento común, y los mandatarios analizarán además la posibilidad de crear una Corte de Justicia del Mercosur, a fin de brindar una interpretación uniforme del derecho al bloque.
Así quedó evidenciado ayer cuando el canciller Héctor Timerman adelantó que los presidentes Cristina Fernández, Luiz Inácio Luda da Silva, José “Pepe” Mujica y Fernando Lugo realizarán mañana, en el marco de la XL Cumbre de jefes de Estado del Mercosur, que se celebra en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, una declaración conjunta en favor de la protección de los trabajadores migrantes.
Lejos del espíritu que prima en los países centrales, que pugnan por la eliminación de trabas aduaneras de modo de brindar una mayor libertad a la circulación de mercancías al tiempo que levantan barreras a los movimientos de hombres y mujeres del mundo en desarrollo, los países del Mercosur se mostrarán decididos a plantar bandera en defensa de la dignidad de todos los migrantes. Los mandatarios avanzarán en la creación de un Estatuto de Ciudadanía para el bloque regional. Luis María Kreckler, secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, señaló que la norma “constituye un plan de acción para la futura conformación de un Estatuto que otorgue a los habitantes de nuestros países derechos y beneficios concretos en su calidad de ciudadanos del Mercosur”. El plan sobre el que trabajarán los presidentes prevé la libre circulación de personas y la igualdad en las condiciones de acceso al trabajo, la salud y la educación.
En la reunión que mantendrán los presidentes mañana, y que servirá como despedida oficial para el mandatario brasileño, que entregará el próximo 1 de enero el poder a Dilma Rousseff, también podría concretarse la creación del cargo de Alto Representante del Mercosur, de manera que el bloque cuente con una figura política de relevancia capaz de representar sus intereses. También se aprobó el criterio de representación ciudadana que determinará el número de bancas que cada país tendrá en el Parlamento común, y los mandatarios analizarán además la posibilidad de crear una Corte de Justicia del Mercosur, a fin de brindar una interpretación uniforme del derecho al bloque.
http://tiempo.elargentino.com - 161210
